La cantante y compositora Norma Peralta, hermana mayor del recordado Miguel Abuelo Peralta, y dueña de una extensa trayectoria en el terreno de la música popular lationamericana, murió en las últimas horas a los 85 años.
Norma había nacido en la ciudad bonaerense de Junín y fue criada en una familia trabajadora que le transmitió su amor por la música. Cuando tenía nueve años nació su único hermano Miguel Ángel, quien luego se convirtió en Miguel Abuelo, poeta, compositor, actor y cantante.
Norma dio sus primeros pasos en el terreno artístico cuando tenía 20 años, entre el canto folclórico y la actuación. Desde ese momento su orientación la llevó al canto popular latinoamericano, particularmente a la música ancestral o nativa.
Tomó clases de guitarra, al poco tiempo descubrió el canto con caja y se dedicó a interpretar canto recopilado del Noroeste argentino. Tomó clases de técnica vocal con la cantante Mercedes Melbros, y paulatinamente se acercó al canto de autor, al tiempo que se dedicó a difundir estos estilos durante varios años.
También cantó a dúo con su hermano canciones folclóricas; mientras Miguel, ya adolescente, comenzaba a relacionarse primero con el teatro infantil para luego pasar al género que cultivaría a lo largo de toda su vida.
En 1972 editó su primer álbum titulado La fuerza del diálogo, acompañada por Naldo Labrín, integrante de los grupos Huerque Mapu y Sanampay; mas tarde, arreglador de Alfredo Zitarrosa, con repertorio folclórico argentino y latinoamericano.
En 1974 grabó su segundo LP, que llevó su nombre y apellido como título y grabó junto a Rodolfo Fernández Brac. El álbum estaba integrado por obras del cancionero latinoamericano de autores como Chabuca Granda, Gustavo Cuchi Leguizamón, Chico Buarque y Violeta Parra, entre más.
Desde hace varios años, Norma venía incluyendo en su repertorio de canto popular latinoamericano canciones acústicas de su hermano Miguel como “Mariposas de madera”, “Oye niño” e “Himno de mi corazón”, entre algunas otras.
